...y sigo pensando de qué manera manera conquistarte, sedurcirte... si bailarte, desnudarme, si chuparte, si... no bastaría ninguno de tus deseos ni de los míos, para cubrir el horizonte de deseo que me despierta la cercanía de tu presencia -aún estando lejos- y que derrite mi piel entre tus dedos.

...el despertar de cada día yo agradezco, sin encontrar palabras, ni versos, ni rezos, pero sin dejar de hacerlo con el pensamiento, agradezco a Dios el regalo de nuestro encuentro.

...sin saber de qué manera mostrarte -probarte-, regalarte... cuánto te amo, sigo viviendo con tu olor sobre mi cuerpo, con tus besos quemando mi sexo y tu saliva en cada palabra que expreso.

¿cómo decirte que ya no soy yo, o que a partir de tí soy un ser nuevo...? que si me veo radiante es por tu luz, que si estoy felíz es por tenerte, que si mi vida es mejor es por abrazrme a tí cada noche y amanecer entre tu cuerpo...

... mi vida pasa así, entre tu presencia, tu cuerpo, tus caricias, tus besos, un día de trabajo y otra vez tu cuerpo... esperando..., sin dejar de pensarte -ni de desearte- ni medio segundo, hasta volver la noche y el día, y otra vez...tu cuerpo...

TE AMO.